jueves, 29 de noviembre de 2012

lunes, 5 de noviembre de 2012

DEBATES ENTRE AMIGOS


El otro día, fuimos a visitar a otro huerto amigo, y surgió una discusión espontánea que me pareció muy interesante. Como el que avisa no es traidor, les dije a mis compañeros y a nuestro amigo que parte de esta conversación iría a parar al blog. El motivo de llevarlo aquí, es simplemente que puso sobre la mesa varias cosas que me hicieron reflexionar.
El planteamiento de hacerse con la etiqueta ecológica, aparte de los trámites necesarios que son engorrosos,  fue el inicio del debate. La primera pregunta que había que hacerse era: ¿Para qué sirve una etiqueta ecológica?. Obviamente, si queremos vender en comercios, nos la van a pedir. Es una forma de que haya una trazabilidad sobre el producto que demuestre que ha sido cultivado de determinada forma para tranquilidad del consumidor que lo recibe en una tienda.
Ahora bien, nosotros no queremos vender en tiendas, nuestro objetivo es vender directamente, al consumidor de confianza que muchas veces nos conocerá personalmente y se sentirá implicado en el proyecto (eso buscamos) y será consciente de que no sólo compra verduras, si no, que está defendiendo un modo de vida distinto.
Entonces surgió el tema de la etiqueta alternativa. En determinados círculos, se ha empezado a hablar de crear una etiqueta “propia” para nuestro tipo de consumidores, y aquí surgió la segunda parte del debate. ¿Si creas una etiqueta no estás partiendo de una base de desconfianza hacia el productor?.
Yo personalmente, nunca he sido muy de etiquetas, porque pienso que muchas veces son nada más que un mero trámite de cara a la galería para decir, “mira que bueno soy” pero seguro que habrá opiniones mucho más dispares y quien me corrija y me diga que estoy totalmente equivocado.
Por eso también, quería plasmar esto sobre el papel, porque creo que estas discusiones dan lugar a un debate abierto que quizás pueda ayudarnos a todos a entender lo que estamos haciendo y las implicaciones que conlleva tanto para el consumidor de nuestros productos como para los productores.